El Caucus Hispano del Congreso de Estados Unidos (CHC) denunció condiciones “crueles e infrahumanas” en centros de detención migratoria operados durante la administración de Donald Trump. Tras realizar visitas sin previo aviso, legisladores como Adriano Espaillat, Sylvia García y Nydia Velázquez relataron que los detenidos sufren trato indigno, hacinamiento y restricciones inconstitucionales en instalaciones que, acusaron, funcionan como “cárceles con fines de lucro”.
La congresista García detalló que, en uno de los centros con más de 800 detenidos, solo 10 personas habían cometido algún delito. “El resto no tiene cargos; están privados de libertad por su estatus migratorio”, afirmó. Los legisladores advirtieron que el sistema criminaliza la migración y llamaron a una reforma migratoria urgente que garantice derechos humanos básicos.