El Atlético de Madrid quedó eliminado del Mundial de Clubes pese a vencer 1-0 al Botafogo con anotación de Antoine Griezmann. El resultado no fue suficiente para avanzar, ya que los rojiblancos necesitaban una victoria por al menos tres goles para clasificar a Octavos de Final.
Tras el encuentro, jugadores y cuerpo técnico del club español manifestaron inconformidad con el arbitraje del mexicano César Ramos, a quien acusaron de no señalar al menos dos posibles penaltis a su favor. Con este resultado, París Saint-Germain y Botafogo avanzaron a la siguiente ronda como primero y segundo del Grupo B, respectivamente.