El gobierno de Dinamarca presentó una iniciativa para proteger a sus ciudadanos del uso no autorizado de su imagen, voz y rasgos faciales mediante tecnología de inteligencia artificial. La propuesta otorga derechos de autor a cada persona sobre su propia representación, incluyendo las creadas por medios digitales como los deepfakes.
La medida fue impulsada por el Ministerio de Cultura y cuenta con respaldo mayoritario en el Parlamento. Una vez aprobada, permitirá que cualquier ciudadano solicite la eliminación de contenidos que utilicen su imagen sin consentimiento. El ministro Jakob Engel-Schmidt destacó que esta ley busca frenar la desinformación y enviar un mensaje a las empresas tecnológicas.