Ciudad de México fue sede de un torneo de ajedrez al aire libre en el Zócalo, donde ciudadanos participaron en partidas contra jugadores profesionales. La actividad incluyó tableros gigantes instalados en la plancha principal, atrayendo a personas de distintas edades.
El evento formó parte de una jornada cultural organizada para promover el deporte ciencia en espacios públicos. Además de las partidas simultáneas, se ofrecieron actividades complementarias como talleres y charlas relacionadas con el ajedrez.