Durante el verano, muchas mujeres a partir de los 50 años experimentan hinchazón en piernas y tobillos debido a las altas temperaturas y los cambios en la circulación. Este malestar puede prevenirse con prácticas cotidianas como mover los pies con ejercicios circulares, aplicar duchas frías en las piernas y elevarlas durante varios minutos al día para favorecer el retorno venoso.
También se recomienda una buena hidratación, incluyendo agua y bebidas naturales como té verde o infusiones de cola de caballo. Para reducir la incomodidad, se sugiere el uso de ropa de tejidos ligeros, calzado cómodo sin tacón elevado y medias de compresión, que ayudan a mejorar la circulación y disminuir la retención de líquidos.
Evitar permanecer sentada o de pie por periodos prolongados, así como aplicar geles refrescantes o sprays con efecto frío, puede complementar estas acciones. Estas medidas permiten manejar mejor la hinchazón y mantener el bienestar durante los días de calor.