Una disputa en la pista entre Lando Norris y Oscar Piastri marcó el Gran Premio de Singapur y generó cuestionamientos sobre el manejo interno del equipo McLaren, que este domingo aseguró el campeonato mundial de constructores en la temporada 2025 de Fórmula 1.
En la primera vuelta del circuito callejero de Marina Bay, Norris intentó un adelantamiento agresivo que lo llevó a chocar tanto con su coequipero como con el piloto de Red Bull, Max Verstappen. El contacto entre los autos de McLaren encendió la polémica sobre la libertad que ambos pilotos tienen para competir entre sí.
Piastri manifestó su inconformidad por radio, cuestionando si el equipo avalaba el movimiento de su compañero. Norris, por su parte, defendió su maniobra y aseguró que cualquier piloto en la parrilla habría actuado igual en esa situación.
McLaren, por medio de su director ejecutivo Zak Brown, indicó que se permitió a ambos pilotos competir libremente. Sin embargo, la falta de intervención del equipo fue observada con atención, debido a que Norris y Piastri también compiten por el título de pilotos.
Aunque el equipo británico celebró su título de constructores, el incidente entre sus corredores dejó en evidencia las tensiones internas en medio de una de las temporadas más competitivas del campeonato.
