La organización El Poder del Consumidor solicitó la cancelación de las autorizaciones a las Caravanas Navideñas de Coca-Cola, argumentando que representan una estrategia publicitaria dirigida a la infancia mediante el uso de símbolos culturales asociados al consumo de refrescos. Señaló que estas actividades vulneran el Reglamento de la Ley General de Salud, que prohíbe el marketing dirigido a niñas y niños en productos con sellos de advertencia.
La agrupación pidió la intervención de la Cofepris, Profeco, la Comisión Nacional y las Estatales de Derechos Humanos, así como de los juzgados competentes, para suspender los desfiles de la marca. Destacó que las caravanas, que recorren distintas ciudades del país, utilizan espectáculos, música y personajes que promueven el consumo de bebidas azucaradas, las cuales están asociadas a un mayor riesgo de obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares.
El organismo recordó que México es uno de los principales consumidores de refrescos a nivel mundial, con un promedio de 163 litros por persona al año, y subrayó que más del 90 por ciento de niñas y niños los ingieren de forma habitual. Según estudios, consumir una lata diaria incrementa hasta en 60 por ciento el riesgo de desarrollar obesidad.
El Poder del Consumidor citó a organismos internacionales como la OMS, la OPS, UNICEF y la ONU, que reconocen la publicidad de productos ultraprocesados como un factor determinante en el deterioro de los hábitos alimentarios de la población infantil. Por ello, instó a las autoridades a prohibir las caravanas este año para proteger los derechos y la salud de la niñez mexicana.