Ozair Viveros
Constantemente se documentan casos de inseguridad o violencia en Puebla, que tienen que ver con el uso de armas de fuego: balaceras, asaltos, ataques directos, riñas y hasta suicidios.
Lo anterior nos lleva a plantearnos la pregunta
¿qué tan fácil -o difícil- es conseguir un arma de fuego de manera ilegal?
Hace unos meses, se dio a conocer el caso de una persona en Coronango, que se quitó la vida utilizando un bolígrafo-pistola que según los familiares, había adquirido en plataformas digitales y que recibió por paquetería.
A Tiempo Noticias hizo una búsqueda al respecto en Mercado Libre, Amazon y hasta Marketplace de Facebook, sin éxito.
La constante de los resultados arrojados, eran pistolas de llavero o armas de uso deportivo.
Aunque existe un mercado negro activo para la compra-venta de armas de fuego, no es un proceso fácil en el sentido de que no puedes simplemente ir a una tienda o sitio web público y realizar una transacción segura.
Según especialistas en seguridad pública, es un proceso que se desarrolla en un entorno de alto riesgo, ilegalidad y peligro.
Se requiere tener el “contacto necesario” o ir con alguien que “conozca” los puntos de venta, acceso que se da principalmente a través de redes criminales, distribuidores del mercado negro, o puntos de venta clandestinos (como algunos tianguis o casas particulares identificadas por el crimen organizado).
Las transacciones en el mercado negro son obviamente peligrosas. Hay un alto riesgo de ser víctima de estafa o fraude, de que el arma sea defectuosa, o de encontrarse con delincuentes que representen un peligro para la seguridad personal.
Se estima que cientos de miles de armas ingresan ilegalmente al país cada año, lo que nutre el mercado negro. Esto significa que hay oferta. Los precios en el mercado negro son altos debido a los riesgos de la cadena de suministro.
Se reporta que los precios varían desde miles de pesos para armas cortas usadas, hasta decenas de miles por un rifle de asalto nuevo.
Asesores de seguridad pública señalan que las armas que circulan ilegalmente en Puebla provienen de diversas fuentes, siendo el tráfico de armas desde Estados Unidos una de las principales.
Además, el robo de armamento a corporaciones de seguridad o particulares, así como la fabricación clandestina, también contribuyen a este flujo ilícito. Recientemente, se han dado casos de elementos de la Guardia Nacional y de la Fiscalía General del Estado, que han sido víctimas del robo de sus armas de cargo.
Pero también, la Fiscalía General de la República ha dado a conocer el desmantelamiento de talleres clandestinos en el estado que se dedicaban a la manufactura de armas.
La Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos es clara: la posesión de armas solo está permitida para seguridad y legítima defensa dentro del domicilio, y bajo calibres y tipos muy específicos.
El procedimiento para adquirir un arma legalmente implica una serie de requisitos rigurosos y un trámite que puede tomar varias semanas, e incluso meses.
En cuanto a los requisitos personales, de acuerdo con el sitio web de Defensa, son los siguientes:
Ser mayor de edad (18 años).
Contar con un modo honesto de vivir (comprobado con carta laboral y constancias de ingreso).
No tener antecedentes penales (se requiere una carta de no antecedentes penales estatal).
Presentar identificación oficial vigente (INE, pasaporte, licencia de conducir).
Comprobante de domicilio reciente a nombre del solicitante.
Cartilla del Servicio Militar Nacional liberada (para hombres).
Acta de nacimiento.
CURP.
Para la solicitud y permiso correspondientes, el procedimiento es el siguiente:
Se debe descargar y llenar el formato de solicitud para adquisición de arma de fuego, cartuchos y/o accesorios, disponible en la página de Defensa o en sus ventanillas.
La documentación se presenta en la Dirección General del Registro Federal de Armas de Fuego y Control de Explosivos, ubicada en la Ciudad de México, o puede ser remitida por paquetería.
Defensa evalúa cada solicitud y, de ser aprobada, emite un “Permiso Extraordinario para la Adquisición de Arma de Fuego, Cartuchos y Accesorios”. Este proceso puede tardar entre 45 y 60 días.