Por: Martha Berra
Los padres de Elianis, la joven cubana asesinada durante el ataque armado en el bar Lacoss en Puebla, regresarán este miércoles 10 de diciembre a su país sin las cenizas de su hija, pese a haber pasado una semana en México para completar los trámites de repatriación.
La familia arribó a Puebla el pasado 4 de diciembre, tras una escala de más de siete horas en Monterrey, con el propósito de recuperar los restos de la joven de 20 años. Sin embargo, los protocolos consulares entre México y Cuba, así como la falta de apoyo económico del gobierno cubano, impidieron que pudieran llevarse las cenizas en su viaje de retorno.
El gobierno de Cuba se negó a cubrir los gastos, pese a anunciar lo contrario
Aunque inicialmente las autoridades cubanas aseguraron que absorberían los costos funerarios y de repatriación, la familia fue informada posteriormente de que no asumirían dichos gastos.
Ante esta negativa, fue el abuelo materno de Elianis, residente en España, quien reunió los recursos y realizó este martes un depósito por 2 mil 545 dólares en el banco Santander para cubrir el proceso.
En una llamada telefónica con personal de la Funeraria Robles, donde el cuerpo de la joven fue incinerado con autorización de la Fiscalía de Puebla, la madre de Elianis, Saili, fue informada de que la entrega de las cenizas no puede hacerse de inmediato debido a los protocolos internacionales para el traslado de restos humanos.
El procedimiento requiere la autorización de cinco oficinas consulares:
- Cuatro dependencias en México, entre ellas instancias de salud, relaciones exteriores y autoridades migratorias.
- Una oficina en Cuba, encargada de recibir y validar la documentación para el ingreso de los restos al país.
Cada autorización toma aproximadamente dos días, por lo que la familia deberá esperar al menos 10 días para que las cenizas puedan viajar legalmente a Cuba.
Aunque ambos padres esperaban regresar con las cenizas de su hija, se vieron obligados a volver a la isla sin ellas debido a la imposibilidad de extender su estancia en México.
Durante su visita, los padres también sostuvieron reuniones con autoridades locales y recibieron información sobre la investigación en curso por el ataque que dejó varios muertos en el bar Lacoss.
Mientras tanto, los padres regresan a su natal Cuba con el dolor de no poder llevar consigo a su hija y con la esperanza de que en los próximos días, por fin, puedan recibir sus cenizas y despedirla en su tierra.
